¿Qué significa ser Instrumentista industrial?

¿Qué significa para mi ser una instrumentista industrial?

Cuando mi Madre me preguntaba que era lo que hacía en el trabajo, no encontré otro modo de simplificar mi descripción de la Instrumentación como el conjunto de sensores de todo proceso y sus intérpretes, acudiendo a sus equivalentes en el cuerpo humano: ojos, olfato, gusto, oídos, tacto; quienes transmiten hacia el cerebro esa información percibida para que sea interpretada y actuar en consecuencia.

De nada le serviría que lanzara términos eléctricos, electrónicos, dinámica de fluidos, ni que dibujara derivadas, no me entendería, así que se lo expliqué en palabras de a centavo, como para quien está lejos de esta realidad que respiro desde 1979.

Madre, nuestros sensores huelen, saborean, oyen y palpan; comparan y deciden de acuerdo a lo almacenado en el cerebro como aprendizaje instintivo o programado; emitiendo órdenes específicas a otras partes del cuerpo, que activarán pensamientos, emociones, movimientos, reacciones, palabras, etc.

El cerebro como controlador decide que acciones tomar porque ya ha aprendido sus límites y parámetros.

Como instrumentistas, configuramos medidores e indicadores para que muestren, cierren, abran, transmitan, enciendan o apaguen, etc.

O bien programamos a los «PLC’s» controladores lógicos programables, con todas las instrucciones detalladas para actúe automáticamente de una determinada manera según el evento que haya ocurrido y deseamos registrar o modificar.

La anterior es quizás una descripción excesivamente simple y resumida para un amplio oficio, la Instrumentación es integral porque se nutre y conecta con otras disciplinas, no basta una carrera de ingeniería para satisfacer las exigencias finales de control e información de los procesos, requiere sudor y trasnocho.

Aunque existen instituciones eméritas que dictan instrumentación, lamentablemente aún no aportan el todo en esta profesión que se alimenta mas de su ejercicio que de su estudio.

A nivel educativo ha sido menospreciada con la permanente desactualización de los pensums de estudio y gran parte del profesorado trabaja sobre teorías que jamás han comprobado.

Y es que este oficio de Instrumentación, Control y Automatización requiere carácter investigativo, estudio constante, sed insaciable.

En I., C. y A., permanecer actualizado es la única constante.

En esa dinámica encontramos profesionales de altísimo nivel con afán de servir a la productividad, quienes avanzan en otro curso, congreso posgrado cada año, nos incentivan al automejoramiento, a no dar por sentado que estamos plenamente capacitados, nos invitan a dudar, a encontrar respuestas a los planteamientos y soluciones a los problemas que surgen a diario.

Mi mentor en esa búsqueda está entre los mas notables instrumentistas de Venezuela, ahora de América, asesor desde 1979 en áreas de Instrumentación Industrial, Control, en Automatización de Procesos Industriales y Edificaciones Inteligentes: el Ing Enrique Delgado-Martínez, un Doctor en Control, formador de Instrumentistas, quien comparte todo en sus clases magistrales, a la vez que aprende con nosotros, destornillador en mano, explorando y ejerciendo de forma práctica en proyectos a cualquier escala. De Venezuela para el mundo.

La Instrumentación exige unir varias disciplinas de la Ingeniería, sumarle ingenio, creatividad, lógica, estética, paciencia, aderezarla con gran curiosidad por los modelos productivos, desarrollar un incansable espíritu de bombero o enfermero de máquinas, ponerle el pecho a las emergencias, gerenciar adelantándose a las contingencias, planificar, investigar, implementar, analizar y repetir todo el proceso.

Para el instrumentista todos los ¨por si acaso¨ deben ser tomados en cuenta.

Por todo ello, ésta es una disciplina que representa un puesto clave en todo proceso de manufactura o servicios: la «cardióloga del proceso.»

Por fortuna ya no son tan escasos los instrumentistas actualizados que nos tomamos en serio ser mucho mas que operadores de instrumentos.

Avanzar es tarea difícil pero no imposible. Cuando creemos dominar un sistema o equipo surge otro mas avanzado, así como la computadora que se cambia cada año.

No sólo los sistemas quedan obsoletos, nosotros también si no abrimos los ojos a las nuevas tecnologías y permanecemos leyendo y explorando, por ejemplo, suscribiéndote a blogs apoyados en colaboradores brillantes de varios países del primer mundo industrial.

A diario el parque industrial recibe novedades, mientras el tecnólogo egresa de su universidad sin ver que esos cambios alcancen a sus profesores, que en su mayoría no ejercen ni tienen muchos proyectos exitosos que citar, salvo aun pocos hermosos casos.

Debemos pisarle los talones a los cambios, absorber información, practicarla, demostrarla, dominarla, luego suministrar soluciones al día, que simplifican y disminuyen el costo de los procesos productivos, aumentan la calidad, optimizan el aprovechamiento de cada recurso, capacitan y desarrollan al capital humano, brindando al mismo tiempo seguridad y bienestar, a los seres humanos, a la economía y al futuro industrializado del mundo.

¿De qué otro modo vamos a garantizar la calidad para confiar en la manufactura?

Los cursos actualizados de INTRAVE nos permiten analizar de buena fuente, con la guía de especialistas de larga trayectoria y su valiosa experiencia práctica en proyectos de todo nivel.

Ampliamos criterios al brindársenos variadas alternativas para solucionar aplicaciones de plantas industriales, comerciales y domésticas, adelantarnos en la plataforma del IIoT, bigdata, smartcities, etc., normas, nuevas técnicas y todo lo que le atañe al profesional de IyA (instrumentación y automatización).

En experimentación constante como en el arte, contribuyendo a mejorar los modelos productivos creando bienestar y prosperidad para las personas.

¡Soy instrumentista industrial!

¡Gracias!

«Por fortuna ya no son tan escasos los instrumentistas actualizados que tomamos en serio ser mas que operadores de instrumentos, somos también artistas, pues la instrumentación aplicada es también un arte.»

Un artículo de Nancy Gutiérrez escrito para Intrave.com LatAm